¿Por qué se dice que los bebés los traen las cigüeñas de París?

Todos hemos oído alguna vez esa leyenda que dice que los bebés vienen de París, envueltos en pequeñas sábanas y mecidos por el viento gracias a las cigüeñas. Ya sea porque nos lo contaron nuestros padres de pequeños para explicarnos de dónde venían los bebés, o nuestros abuelos cuando nos leían cuentos, o bien porque lo hemos visto en alguna película de dibujos animados… sea como fuere, a más de uno seguro que os sonará esta historia.

Lo cierto es que no deja de ser una fantasía que nos gustaba imaginar cuando aun éramos niños, pero aun así, años más tarde, tampoco nos sorprende escuchar a alguno de nuestros amigos diciendo “ya le hemos escrito la carta a la cigüeña” o a nuestros familiares impacientes preguntando “¿cuándo viene la cigüeña de París?” para hablar de un bebé que está en camino.

El origen de esta fábula se encuentra precisamente en una pequeña región de Francia: Alsacia. Se dice que una noche dos cigüeñas montaron su nido en lo alto de una casa de este pueblo, en la que vivía desde hacía años una joven pareja. Pasado un tiempo, las cigüeñas emigraron y tras su vuelta, los jóvenes tuvieron un bebé. Los felices padres y todos los habitantes del lugar creyeron que el viaje de las aves había dado fruto al nacimiento y que el bebé que vino al mundo había sido traído por ellas. Con el tiempo, y motivado por el simbolismo que todos los padres fueron dando a esta historia, Alsacia fue sustituida por París en el cuento, ciudad que, ya por aquel entonces, era conocida como la ciudad del amor.

Dejando a un lado lo imaginario de esta historia, las cigüeñas son aves que siempre han sido símbolo y referente de la maternidad, entre otras razones, por el especial cuidado con el que protegen a la familia y la extraordinaria dedicación con la que elaboran el nido, pilar fundamental para su crecimiento. Precisamente por ello, no es de extrañar que esta dulce historia se haya mantenido viva con el paso de los años, y que las cigüeñas sean sus protagonistas, pues no hay mejor reflejo que ellas en el mundo animal del amor y el cariño con el que unos padres viven la experiencia de dar a luz a un nuevo bebé.

En Libélula Handmade también nos gusta imaginar cada día y por eso hemos creado nuestro particular grupo de cigüeñas, que son las encargadas de hacer llegar la ropa que fabricamos con ilusión a las casas de los más pequeños. Y tú, ¿todavía no le has escrito una carta a la cigüeña?